Agentes de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés) frenaron más de 600 mil dólares en drogas que pretendían cruzar a Estados Unidos por la frontera deSan Luis Río Colorado, una de las zonas bajo el control del Cártel de Sinaloa.
De acuerdo con un comunicado de la CBP, se trató de dos incautaciones realizadas el pasado viernes en las instalaciones del cruce fronterizo de San Luis, en los límites entre Arizona y Sonora; la droga incautada sumó 80 libras (36.2 kilos) de metanfetamina y 47 libras (213 kilos) de cocaína, con un valor estimado en el mercado ilegal de hasta 668 mil dólares, indicó la dependencia estadounidense.
Ambos decomisos dejaron como saldo a dos ciudadanos de origen estadounidense detenidos. El primero de ellos, un hombre de 37 años, ocultaba ocho paquetes de metanfetamina entre los neumáticos de su camioneta y que fueron valuados en 169 mil dólares.
El segundo detenido fue un hombre de 46 años, a quien los exámenes para detectar narcóticos permitieron localizar 20 paquetes ocultos entre una caja de altavoces; al analizar la sustancia asegurada se confirmó que era cocaína, con un valor en la calle de hasta 499 mil dólares.
“Nuestros oficiales, equipos K9 y operadores de sistemas de imágenes han realizado un trabajo increíble en tan poco tiempo. Estas dos incautaciones realmente ponen de relieve los múltiples niveles de inspección que tiene la CBP en el puerto de entrada”, indicó Chris León, director del puerto de San Luis.
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Los hechos fueron realizados en la colonia Residencias (Foto: @MesaSegSonora)
San Luis Río Colorado, en Guerra
El decomiso anunciado por la CBP se produjo en los límites entre Sonora y Baja California, una zona en constante disputa por organizaciones criminales pero que en los últimos años enfrentó a dos facciones del Cártel de Sinaloa: Los Rusos, al servicio de Ismael El Mayo Zambada, y Los Chapitos.
La disputa es por el control de una de las principales rutas para el trasiego de drogas a Estados Unidos -la segunda solo detrás de Tijuana- inició después de la extradición de Joaquín El Chapo Guzmán a Estados Unidos y la irrupción de Los Salazar (brazo armado al servicio de El Chapo) a San Luis Río Colorado, en donde trabajaron en conjunto con Los Chapitos, pero que con el tiempo se distanciaron de ellos.
Recientemente un nuevo brazo armado que se identificó como los “Mata Salas” apareció en un video que circula por redes sociales. Encapuchados y armados con rifles de asalto, dejaron en claro que la violencia por el control de la plaza ahora tiene tres frentes: Los Rusos, Los Chapitos y Los Salazar.
En respuesta a la violencia que se registra principalmente en la zona norte de Sonora, el gobernador del estado, Alfonso Durazo, reconoció que existen elementos para considerar que “los grupos delictivos han rebasado a las instituciones” y que en regiones como San Luis Río Colorado, el gobierno municipal “es incapaz de atender los fenómenos delictivos y de inhibir los ataques a sus elementos, los cuales son de naturaleza violenta, con arma de fuego, poniendo en grave riesgo a la ciudadanía”.
Para intentar frenar esa violencia que acompaña al tráfico de drogas, el gobierno de Estados Unidos lanzó la Operación Plaza Spike con la intención de capturar a los jefes de plaza de los grupos criminales que operan en la frontera entre Sonora y Arizona.
La intención es reducir el trasiego de drogas-principalmente fentanilo- y evitar que desde Estados Unidos regresen dinero en efectivo y armas a los cárteles mexicanos, lo que les facilita continuar con sus operaciones. Esta semana la Operación Plaza Spike se extendió hasta El Paso, Texas, otra de las fronteras claves para el narco mexicano.
Con información de INFOBAE
