Los partidos Acción Nacional, de la Revolución Democrática y Revolucionario Institucional irán juntos a las próximas elecciones, tanto en los comicios de este año en el Estado de México y en Coahuila, así como en las elecciones presidenciales y de la Jefatura de Gobierno en la Ciudad de México en 2024. Esto, después de que en septiembre pasado las dirigencias de los tres partidos informaron sobre la suspensión temporal de la coalición, luego de que varios integrantes del PRI respaldaron la iniciativa del gobierno para extender la participación de las Fuerzas Armadas en tareas de seguridad pública hasta 2028.
La alianza Va por México acordó que el PAN designará al candidato a la Presidencia en 2024, mientras que el PRI elegirá a los abanderados a las gubernaturas del Estado de México y Coahuila para la elección de junio de este año, en tanto que el PRD, se quedó sin nada.
En el reparto de posiciones, al PAN también le corresponderá nombrar al candidato a la jefatura de Gobierno de Ciudad de México, cargo que igualmente se renovará en 2024, mientras que al PRI le tocará designar a los candidatos a las gubernaturas del Estado de México y Coahuila, que celebrarán elecciones el próximo 4 de junio.
En el caso del PT, se fortalece la presencia de este partido a nivel nacional y la lealtad al presidente de la República, con la alianza con Morena en el Estado de México en la postulación de la exsecretaria de Educación Delfina Gómez, así como en la postulación de Ricardo Mejía como candidato en el estado de Coahuila, quien se desempeñara como subsecretario de Seguridad Pública, y en cuyas negociaciones ha sido factor fundamental el senador Gonzalo Yáñez.
Sin embargo, desde ahora, el exgobernador José Aispuro Torres ha comenzado a mover sus redes, entre las que se incluyen acuerdos con la cúpula, tanto con los dirigentes partidistas como con Marcelo Ebrard, quien se ha convertido en aspirante a la candidatura presidencial por Morena, con el fin de alcanzar la candidatura al Senado de la República, a donde regresaría después de casi una década.
En Durango, se mantiene como lastre el desorden financiero de su administración, lo que podría ser un problema para la definición de candidatos de la Alianza en nuestra entidad dado que inclinaría la balanza en favor del grupo político afín a la anterior administración, que generó las tempestades que aún se sienten en el ambiente político.
Por eso, ha señalado el Gobernador Esteban Villegas Villareal que los candidatos en 2024 no pueden ser corruptos; sino que éstas dependerán de las decisiones que tomen los partidos que conforman la Alianza va por México.
Así, esta alianza que surgió en 2021 como una coalición legislativa que busca desde la Cámara de Diputados hacer frente a las reformas con las que están en desacuerdo, y que son impulsadas por el presidente Andrés Manuel López Obrador y Morena, tendrá uno de sus retos más grandes en la definición de las próximas elecciones donde serán los ciudadanos quienes decidirán a los representantes populares, que deberán tener una trayectoria impecable y fuera de duda. Es sólo cuestión de tiempo.