La corrupción siempre es cosa del otro, en los últimos años, al mismo tiempo personajes que proclaman la corrupción de la clase gobernante de cualquier sexenio, les parece muy normal hacer “negocios” con esos rateros, corren a visitar a su contador para ver como pagan menos impuestos y, en muchos casos, sobornan al funcionario que se les ponga enfrente para agilitar un trámite. Y así comenzamos nuestra cuenta.
1.- El Gobernador José Rosas Aispuro Torres tiene la confianza de que el presidente Andrés Manuel López Obrador, le ayude antes de concluir la administración estatal para poder dejar las finanzas lo más sanas posibles, debido a que a Durango no se le ha entregado mil 200 millones de pesos correspondiente a aportaciones para el gasto educativo, aunado a que en los dos últimos meses le han recortado recursos por el orden de los 800 millones de pesos.
2.- Comenzaron las traiciones ya al interior de las administraciones, ya hay quien quiere negociar información confidencial a cambio de plazas o permanecer dentro del servicio público, quienes llegaron con “hambre vieja”, desde los negocios inmobiliarios, terrenos en áreas estratégicas o la adjudicación de propiedades oficiales que no cuentan con escrituración, así como con la venta de plazas y el chantaje con la publicación de documentos confidenciales.
3.- Con el anuncio de la integración de las Comisiones de Entrega Recepción, en algunas áreas de las administraciones estatal y municipales comienzan a figurar nombres de personajes políticos que han sido señalados con anterioridad por desvío de recursos y actos de corrupción, por lo que de que sean ellos quienes encabecen las áreas que reciben sería en detrimento de la percepción ciudadana, que espera un cambio real de nombres y de funcionarios, que ahora trabajen por Durango y no sólo por sus intereses.
4.- Después de la información que se diera a conocer algunos casos de nepotismo que se registran en la Secretaría de Educación, se hizo un rastreo al interior de la dependencia para ubicar las oficinas de quienes fueron los encargados de filtrar la información, siendo en las áreas de Rafael Palencia y Eduardo Monreal donde se dispuso de ella, sobre todo, para buscar facilidades para continuar dentro de la estructura burocrática a pesar del nulo trabajo.
5.- En la Entidad de Auditoría Superior del Estado, donde la titular Lourdes Mora ha comenzado a realizar cambios al interior para ofrecer algunos lugares a personajes políticos a fin de que le representen una defensa a su trabajo, cuando también, los resultados han sido deficientes y las revisiones a las dependencias se han hecho a modo, como el caso de El Mezquital con el señalamiento de obras “fantasmas” del alcalde Osvaldo Santillán, más cuando es ella misma, quien tiene todavía una serie de movimientos financieros que deberá de explicar cuándo fue la directora administrativa de la Secretaría de Salud.
6.- A nivel municipal los negocios al amparo del poder se multiplicaron, existen 400 ventanas clandestinas, las cuales fomentan el alcoholismo principalmente entre los jóvenes, sin que existan acciones por parte de la Presidencia Municipal para combatir la comercialización de bebidas alcohólicas al margen de la ley, lo que es muestra de la deficiente labor del área de Inspectores, así como la compra de conciencias para la realización de esta actividad, ya que incluso señalamientos de regidores involucrados con grupos delincuenciales.
7.- Esperemos que el próximo gobierno municipal sea más cauto, el área de desarrollo urbano es una anarquía, sin tomar en cuenta la autorización de 15 mil licencias de construcción, sobre todo, porque no hay seguimiento a la planeación para el crecimiento de la ciudad, además de que este concepto de recaudación representa junto con el pago de infracciones de tránsito, el mayor monto de ingresos propios.
Y así, esperamos que los políticos voraces ya no formen parte de la administración, y ya no siga el daño a los duranguenses.
