La verdad, no espero mucho del actual Congreso de Durango en pleno, y menos, de quienes, en complicidad, amparan a quienes cometen delitos sexuales y abusos contra las propias compañeras. Enrique N, por ejemplo, se hace el muy conocedor de derecho y tal vez lo es, pero eso no implica que respete la ley y menos que honre su encargo.

Es tan homofóbico como todos los demás que hoy votarán en contra de acatar una necesaria reforma a la ley que reconozca los derechos CIVILES de todas las personas. En 2018, cuando ambos éramos diputados, ME AGREDIÓ SEXUALMENTE y lo hizo por su incapacidad de reconocer mi orientación sexual, con ganas de demostrarme y de demostrarle a su tan envilecida hombría que las LESBIANAS no existimos y que solo necesitamos un ”machote” (como él, según él, jajaja) para cambiar “de opinión”.

Todo esto lo supieron los demás, lo saben los demás, pero prefieren protegerlo y encubrirlo a él antes que trabajar por la justicia y tratar de poner el ejemplo para evitar que quienes abusan de su poder, sigan creyendo que gozan de absoluta impunidad para pasar por encima de la dignidad de las mujeres y de las personas en general. Él y sus cómplices, no se merecen para nada el privilegio de ser representantes de la sociedad duranguense pues, al contrario de lo que merecemos, ellos representan lo peor de la corrupción, de la misoginia, de la homofobia, de la delincuencia de cuello blanco.

Comprendamos que a ellos, poco les interesa la moral o los valores que hoy argumentarán defender, más bien les interesa sólo enriquecerse y seguir recibiendo prebendas y beneficios económicos de otros grupos de poder. Se podrán decir nuestros amigos, decir que nos respetan o intentar de todo para tomarse la foto con nosotras, pero jamás serán nuestros aliados.

Ellos NO NOS REPRESENTAN y NO PODEMOS CONFIAR EN ELLOS, ni esperar de ellos la más mínima empatía o responsabilidad para con sus electores. EN QUIEN SI CONFÍO, es en el pueblo de #Durango, en sus mujeres y en sus hombres que son mucho más evolucionados y conscientes que la mayoría de nuestros legisladores piratas.

Confío en las y los duranguenses y sé, que aunque hoy se vote en contra de los derechos humanos en el Congreso de Durango y también se sigan encubriendo a los abusadores sexuales que han investido como diputados, o a quienes protegen desde su mandato, mañana nosotras y nosotros, LAS y LOS CIUDADANOS, los expulsaremos y los confinaremos al olvido.

Su vergüenza será haber tenido la oportunidad de hacer historia y haberse escondido en las presiones de su bancada o de patrones distintos a su pueblo.

No se preocupen, defensoras y defensores, la HISTORIA la HAREMOS NOSOTRAS, sin ellos. Estoy muy orgullosa de ustedes y estoy muy segura de que VECEREMOS. No desistamos 😌💜🙏🏽Abrazo buen fuerte 😊✊🏻🔥¡DURANGO, DESPIERTA! 👏🏼✨

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