Cada día, aparecen datos sobre el faltante de recursos en todas las dependencias y del saqueo que se llevó a cabo con la complicidad de los servidores públicos de la administración anterior, y bajo indicaciones de personajes externos que ante su ambición desmedida provocaron el robo más grande que se haya hecho en Durango. Y así, comenzamos nuestra cuenta.
1.- La reingeniería financiera estatal debe darse en concordancia con el gobierno federal para enfrentar el incumplimiento de los pagos por parte de la anterior administración y reducir el gasto corriente al erradicar el nepotismo en algunas áreas así como borrar de las listas de proveedores a los compadres y amigos, que se beneficiaron con la proveeduría y las obras, y olvidarse de asesores que solo acudían a cobrar sus altos salarios por no hacer nada, mientras que hubo áreas cubiertas sólo por familiares que no acudían a laborar y que contaban con compensaciones elevadas..
2.- La Secretaría de Educación está a punto de declararse en quiebra por el cumulo de deudas millonarias que enfrenta, al contar con un adeudo histórico, sino impagable, pasivos que tienen a la SEED en una situación crítica porque en este momento no hay dinero ni siquiera para la nómina, por lo que el gobernador, Esteban Villegas, realiza esfuerzos extraordinarios para pagar la quincena de los maestros y administrativos, así como gestionar recursos para pagar.
3.- Esa es la situación que se revisará a nivel central porque los apoyos que se enviaban se hicieron humo, tan sólo en la Universidad se adeudan más de 300 millones de pesos, además de que en las diversas instituciones educativas dejó de pagarse el ISR, como recomendación del propio Secretario Rubén Calderón Luján, quien asignó las obras de este sector a la empresa Punto, muchas de ellas de mala calidad y con sobrecostos ,ientras que el Tecnológico ni siquiera puede pagar su consumo de agua.
4.- Las consultorías beneficiaron a unos cuantos, y fue un renglón dentro del robo del siglo en Durango, con un personaje panista exdelegado del Seguro Social que fue inhabilitado en la administración federal, pero que definía muchas de las acciones para contribuir al saqueo. A eso se suman las auditorías que debieron realizar la EASE y la Contraloría Estatal, que sólo simularon la supervisión de obras y la aplicación de los recursos en los diferentes programas, entre los que destacan los que deberían llevar a cabo los organismos descentralizados, donde destaca el DIF Estatal.
5.- Para los municipios, el robo fue de mil 500 millones de pesos en participaciones federales, aunado al saqueo que hicieron algunos presidentes salientes el último día de su administración, que vaciaron las cajas de la tesorería y que incluso ahora están denunciados en la Fiscalía Anticorrupción, como el caso de Canatlán.
6.- Los proyectos particulares con recursos públicos fueron el símbolo del sexenio, sobre todo desarrollos hoteleros e inmobiliarios, plazas comerciales, tanto a nivel local como en otras partes del país, donde no se notó la ausencia de recursos mientras que las obras insignia de la administración fueron abandonadas y que, de vivir Francisco Villa, serían signo de vergüenza para el Centauro del Norte.
7.- Los fondos para la seguridad pública también se volvieron humo, dejó de dotarse a las corporaciones municipales de uniformes, armas y vehículos, indispensables para su operación en beneficio de los ciudadanos, mientras que el C5 está destruido sin rehabilitación y en el Cefereso nuevo, en el que habría aportación estatal, las obras fueron de mala calidad y habrá que investigar la participación d3 los recursos federales que administró el estado.
El deber moral de los nuevos funcionarios es darle una explicación a la sociedad y cumplir con la reparación del daño, sancionando a quien haya cometido ilícitos para dejar de vulnerar el estado de Derecho en Durango, porque al que menos tiene le cargan todo el peso de la ley y a los delincuentes de cuello blanco: “Y no te acabes Durango”.