Durango, Dgo. (EL CONTRALOR). – El matrimonio “La medusa” Aispuro-Barrantes impuso y administró durante seis años un sistema piramidal de corrupción que abarcó prácticamente todos los posibles espacios donde vieron la oportunidad de saquear y lucrar para su beneficio las arcas del erario estatal.
Quizá no todas las “trincheras” las vieron con el objetivo directo de sacar dinero o incrustar su red de proveedores con prestanombres, pues en otros espacios se dieron cuenta que el beneficio era distinto, con ganancias también, pero de manera indirecta.
Su visión empresarial y de negocios en el entorno gubernamental y en el ejercicio del poder fue tal que tuvieron la habilidad de dejar sembradas las posiciones necesarias para que “el negocio saqueador” no se detenga ni siquiera con el cambio sexenal. Y al parecer, lo están logrando.
Mientras el nuevo gobierno que encabeza el priista Esteban Villegas Villarreal hace mil maromas para tratar de sortear la realidad financiera, política y social que le heredó su antecesor, el panista José Rosas Aispuro Torres, en los hechos, el de Tamazula y su esposa-socia le siguen dando vuelo a la hilacha gracias a los socios-subalternos que siguen vigentes en esos espacios y que por supuesto le deben sus posiciones a “la medusa”, el ex Gobernador Aispuro Torres y a su esposa Elvira Barrantes.
Una pieza fundamental de esa sociedad corrupta y depredadora es, indudablemente, el aún Magistrado Ramón Gerardo Guzmán Benavente, a quien desempolvaron en 2016 de la marginalidad profesional -nunca se ha distinguido por ser un litigante próspero o de buena reputación-, para hacerlo Fiscal General del Estado de Durango, donde tejió sus redes para contar con las alianzas necesarias que le permitieran hacer jugosos negocios triangulando esas influencias con su despacho de abogados y posteriormente cerrando la pinza al frente del Poder Judicial del Estado de Durango.
Sin embargo, la Fiscalía General del Estado de Durango, la Fiscalía Especializada en combate a la Corrupción del Estado de Durango y por supuesto el Poder Judicial del Estado con Ramón Gerardo Guzmán Benavente como cabeza más visible aún vigente desde la magistratura por propuesta del PAN, son instituciones en las que “la medusa”, Aispuro y Elvira, sembraron infinidad de serpientes directivas y operativas, como para poder defenderse con esos aliados internos cuando se requiera, en caso de que verdaderamente la lucha del gobierno de Villegas Villarreal suba la mira y pretenda llegar a querer tocar hasta lo alto sus intereses.
Complicidad: “La enfermedad” de Guzmán Benavente
Del Lic. Ramón Gerardo Guzmán Benavente existen los antecedentes de que como Fiscal General del Estado de Durango designado por el ahora exgobernador José R. Aispuro Torres, el 15 de septiembre de 2016, tuvo que ser removido de su cargo el 14 de noviembre de 2017 después de que una madrugada del mes de mayo de ese mismo año, el ejército mexicano asentado en Durango, ingresó a las instalaciones del CERESO No. 1 en Durango capital; después de haber sido obstruido por bastante tiempo por los celadores de turno buscando bloquearles el acceso y, ante esto, las fuerzas castrenses se impusieron y entraron por la fuerza en donde encontraron un sinfín de irregulares que se estaban cometiendo dentro del penal, mismas que fueron judicializadas por parte de la institución militar en Durango y, transcurrido un tiempo, la comandancia de la Décima zona militar, a cargo del General de Brigada DEM Homero Mendoza Ruiz, se percata que dichas carpetas de investigación estaban durmiendo el sueño de los justos en los anaqueles de la Vicefiscalía General del Estado, situación que obligó informar al alto mando militar con sede en la SEDENA, quien actúo inmediatamente causando un estruendoso escándalo político para la administración estatal panista autollamada Gobierno “Dgo. Para Todos” y, por cuya causa son cesados de sus responsabilidades, tanto el Fiscal General como el Vicefiscal General y algunos funcionarios más, así como, agentes del ministerio público que estuvieron a cargo de dar seguimiento a las carpetas de investigación por las denuncias interpuestas por parte de las fuerzas castrenses asentadas en Durango. Esta fue la real enfermedad que padeció Ramón Gerardo Guzmán Benavente, ya que recibió no tan solo una enérgica reprimenda por parte de la SEDENA, sino que, mantiene sendas carpetas de investigación en su contra. La pregunta sería: ¿Con estos antecedentes cómo es que fue propuesto Magistrado por parte del ahora ex gobernador, José R. Aispuro Torres?, ¿Por qué el 2 de octubre de 2019 la LXVIII Legislatura del H. Congreso del Estado lo designa Magistrado Numerario y porqué la LXIX Legislatura del H. Congreso lo ratifica Magistrado Presidente del Poder Judicial a pesar de sus oscuros antecedentes?
Pero, la red legal que se comunica en torno a Ramón Guzmán Benavente sigue ahí, tiene poder, tiene espacios de suma trascendencia en la toma de decisiones jurídicas y sobre todo en la operatividad de las mismas, y será difícil que a todos ellos los puedan detectar y/o despedir en el primer año de mandato del nuevo gobierno, por lo cual la familia Aispuro-Barrantes tiene garantizado un periodo de gracia e impunidad si se mantiene la lealtad de estos eslabones, y mientras siga en la médula del poder judicial el abogado de cabecera del matrimonio, quien goza del premio de ser Magistrado ex Presidente por obra y gracia de “La medusa” y su títere el PAN-Durango.
El viacrucis de Esteban.
Así, mientras el gobernador Esteban Villegas Villarreal tiene la urgente necesidad de recurrir al endeudamiento y al aumento de los impuestos para hacerse de capital económico porque su antecesor en la gubernatura y sus socios en el hurto se llevaron todo cuanto pudieron, en la perversa y ruin sociedad formada por los Aispuro Barrantes no pasan penurias, no se despeinan y no les genera ningún tipo de temor ni siquiera la detención de José Alberto “N”, quien fuera seis años su operador financiero número dos en el gobierno panista autollamado “Dgo. Para todos”
La actual administración estatal que se propuso Defender a Durango en las pasadas campañas, ha dado un golpe que podría sonar contundente con el encarcelamiento de José Alberto “N”, pues se trata de la detención en Jalisco del ex Subsecretario de Egresos de la Secretaría de Finanzas y Administración del Gobierno del Estado de Durango en el periodo 2016-2022.
LA DETENCIÓN DE UN POLLO. –
Sobre la detención de José Alberto “N”, ex Subsecretario de Egresos en la dependencia que dirigió todo el tiempo Jesús Arturo Díaz Medina, alias “El To-toy”, la información oficial narró así los hechos en una circular que a la letra dice:
“La Fiscalía General del Estado de Durango informa que este jueves 05 de enero de 2023, fue detenido en la ciudad de Guadalajara, Jalisco, José Alberto “N”, Subsecretario de Egresos de la Secretaría de Finanzas y Administración del Gobierno Estatal 2016- 2022.
Dicha persona contaba con órdenes de aprehensión otorgadas a la Fiscalía General del Estado, por el delito de robo agravado, así como por el delito de peculado, obsequiada a la Fiscalía Especializada en Combate a la Corrupción de Durango.
El arresto se dio gracias al trabajo de inteligencia de la Fiscalía General del Estado de Durango y de la Fiscalía Especializada en Combate a la Corrupción de esta entidad, en colaboración y participación con la Fiscalía del Estado de Jalisco y de la Fiscalía Especializada en Combate a la Corrupción de esa misma entidad.
El ex funcionario del Gobierno Estatal fue trasladado a la ciudad de Durango e ingresado al Centro de Reinserción Social No 1, donde quedó a disposición del juez requirente quien se encargará de determinar su situación legal en las próximas horas y en espera de su audiencia inicial.”
La revista Proceso en su edición digital abundó más sobre la captura de José Alberto “N”, derivado de que fue el medio de comunicación nacional que tuvo acceso a las declaraciones hechas por la operadora de Bustamante, la que fue detenida el pasado 16 de septiembre con más de un millón de pesos en efectivo que sustrajo de la Subsecretaría de Egresos para llevárselo precisamente al ex Subsecretario.
En la edición del 27 de noviembre pasado Proceso publicó: “El exsecretario de finanzas del Estado Jesús Arturo Díaz Medina y el subsecretario de egresos José Alberto Bustamante Curiel, desde el pasado mes de septiembre cuentan con órdenes de aprehensión y son buscados por la Interpol en 195 naciones por delitos de corrupción y ejercicio indebido de la administración pública. La investigación involucra al exmandatario José Rosas Aispuro Torres y a su hermana Tere.
El desfalco es incalculable: Solo este caso implica, cerca de mil 500 millones de pesos.
Se sumó una denuncia de la Universidad Juárez del Estado de Durango (UJED) presentada ante la Fiscalía Anticorrupción porque finanzas no entregó 304 millones de pesos. En la Secretaría de Educación se documenta el faltante de más de mil millones de pesos. Lo mismo en la Secretaría de Salud. Contraloría del Estado, tiene al 15 de diciembre para armar los expedientes.
Apenas el pasado 24 de noviembre, María Elvira Barrantes Velarde, esposa del exmandatario Aispuro Torres, también fue denunciada por enriquecimiento ilícito ante la Fiscalía Especializada en combate a la Corrupción del Estado de Durango por el prestigiado periodista Fernando Miranda Servín, Director General de Raza Cero.
A solo un día de concluir la administración, los dos exfuncionarios de finanzas ordenaron que les enviaran en efectivo, el ultimo millón y medio de pesos que quedaba en una cuenta del banco Santander. La orden fue que igual que en otras ocasiones, en finanzas, Luisa “N”, asistente técnica del subsecretario de Egresos recogería el envío efectuado por el servicio Panamericano de Protección y lo llevara directamente a casa de alguno de los exfuncionarios. Por una llamada anónima, se interceptó a la joven con el dinero y las evidencias documentales.
CINISMO DE “LA MEDUSA”
Sin embargo, la detención del ex Subsecretario de Egresos no estresa al matrimonio Aispuro-Barrantes en lo más mínimo. Ellos se siguen confiando en las alianzas que tejieron, en los acuerdos de impunidad que hicieron en varias vías del poder político y fáctico, y por supuesto se atienen a los cómplices que están dentro de todo el sistema legal con el cual podrían llegar a perseguirlos.
La gente que fue cabeza de cada institución pues obviamente ya se fue de ese lugar la gran mayoría. El sexenio de Esteban Villegas Villarreal los ha ido desplazando lentamente. Algunos hasta ahora en diciembre y enero los han despachado para que ya no sigan al frente de dichos espacios.
Para los duranguenses la aprehensión de José Alberto “N” es un paliativo, igual como si fuese un pollo utilizado para calmar el hambre, cuando la irritación social duranguense reclama y exige a los pavos (Jesús Arturo Díaz Medina, Arturo Salazar Moncayo, Ramón Dávila Flores, Lourdes Mora Serrano, Raquel Leila Arreola Fallad, Rosario Castro Lozano, Rogelio Alonso Vizcarra, Verónica Terrones Romero, Jaime Rivas Loaiza, Manuel Sánchez Zamudio, entre otros muchos más.) y claro, a la avestruz, Elvira Barrantes Velarde y si a esta última logran indiciarla; para la administración del “Dgo. Con el Valor de su Gente” sería no tan solo un Home run con casa llena, sino que pasaría a los anales de la historia del estado de Durango.
