Una investigación del diario estadounidense The New York Times denunció que las Fuerzas Armadas en México han asumido cada vez más funciones por órdenes del actual gobierno federal, pero operan con escasa supervisión, lo que preocupa a activistas y defensores de derechos humanos que consideran que debería haber una vigilancia y evaluación sobre sus acciones por parte de un organismo civil. Los críticos afirman que los militares han hecho frente a las violentas organizaciones criminales, pero en el proceso han puesto a los habitantes en riesgo de convertirse en víctimas de tácticas agresivas.
Durante el actual gobierno lopezobradorista, los militares han rebasado su misión principal de seguridad y aplicación de la ley, para desempeñar gran variedad de negocios lucrativos, ya que construyeron y operan el AIFA, están construyendo gran parte del proyecto Tren Maya, que tiene un costo de 20 mil mdd, el cual también administrarán una vez terminado.
También están a cargo de las aduanas del país, unas de las mayores fuentes de ingreso de México, que en 2022 tuvo previsto generar 59, mil mdp, y este tipo de responsabilidades, advierten los analistas, le dan a los militares la capacidad de recaudar dinero por su cuenta y podría socavar el equilibrio del poder de México.
La Sedena está bajo las órdenes de un general en servicio activo, no de un líder civil y no está obligada a hacer públicos documentos o informes de sus actividades y con regularidad se niega a comparecer frente al Congreso de México para responder preguntas, acota el rotativo estadounidense.
(La Crónica)
