Con ventas de dos mil mdd en juego, el gobierno federal amaga con cerrar la cartera y pinta su raya: no permitirá que farmacéuticas trasnacionales “le impongan criterios económicos” y lo obliguen a comprar vacunas anticovid para 2023; incluso, aún evalúa si será necesaria una nueva ronda de vacunación, dijo el subsecretario de Salud Hugo López Gatell al denunciar la existencia de un esquema de “obsolescencia programada” en las vacunas que ofrecen los grandes consorcios farmacéuticos, que han creado productos que requieren de un continuo consumo mediante refuerzos periódicos, en vez de crear reactivos de un solo uso.
También apuntó que los argumentos científicos detrás de una nueva ronda de vacunación “aún no son claros”, por lo que, aun cuando ya se apartó una bolsa potencial para la compra de reactivos en el Presupuesto de Egresos 2023, no es un hecho que el gobierno vaya a negociar otros contratos con farmacéuticas de EU, Rusia, China y Gran Bretaña. Acusó que su equipo ha sido blanco de un constante “cabildeo” por parte de la industria farmacéutica para tratar de convencerlos de la necesidad de comprar millones de vacunas, creando un mercado de consumo permanente. (Milenio)