(Foto Prensa Libre: Esbin García)
En un contexto demográfico marcado por el envejecimiento de la población, los latinos y asiáticos se erigen como protagonistas del crecimiento poblacional en Estados Unidos. Según el último censo, estas comunidades no solo están aumentando en número, sino que también están rejuveneciendo el perfil demográfico del país.
A medida que la generación del baby boomer avanza en edad, se espera que la proporción de personas mayores en la población estadounidense crezca significativamente. Esto plantea desafíos en términos de servicios de salud y programas sociales. Sin embargo, la inmigración y el crecimiento natural de las poblaciones latinas y asiáticas ofrecen una solución potencial a esta crisis demográfica.
Los latinos representan aproximadamente el 18% de la población estadounidense, mientras que los asiáticos han visto un incremento del 72% desde el año 2000. Estos grupos, en su mayoría jóvenes, contribuyen a la fuerza laboral y al dinamismo económico del país. Además, su creciente presencia cultural enriquece la diversidad de EE.UU., convirtiéndolo en un mosaico de tradiciones y lenguas.
El futuro del país depende de cómo se integren y se valoren estas comunidades en el tejido social, ofreciendo así una oportunidad para un renacer poblacional en un escenario que, de otro modo, podría ser sombrío.
